ODS9. «Orange considera a las personas como mucho más que consumidores y a la sociedad como mucho más que un mercado»

Entrevistamos a Luz Usamentiaga, responsable de Relaciones Institucionales y RSC de Orange, para hablar de la política de responsabilidad social corporativa y las buenas prácticas de la multinacional de telecomunicaciones francesa en esta materia.

¿Podrías explicarnos cómo llegaste a este mundo de la RSC? ¿Qué recuerdas de esos inicios, cómo estaba la RSE en nuestro país y en tu organización?

Asumí las responsabilidades sobre RSC en Orange y sobre la Fundación hace tan solo unos meses, concretamente, en abril de este año. Hasta entonces, he sido testigo de la importancia creciente que la responsabilidad social tiene en Orange y que no es más que la respuesta a lo que nos demandan nuestros clientes, nuestros “stakeholders” y desde luego, y de manera muy especial, los propios empleados de la compañía.

La RSC ha dejado de ser un departamento más para convertirse en una manera diferente de mirar nuestro negocio y de analizar y valorar los impactos que el mismo genera en el entorno en el que prestamos nuestros servicios. Queremos hacerlo de manera más eficiente y aportando a la sociedad un propósito que va más allá de la actividad comercial, lo que significa considerar a las personas como mucho más que consumidores y a la sociedad como mucho más que un mercado.

¿Cómo ha evolucionado la estrategia de RSE de Orange en estos últimos años hasta la actualidad y cuáles son, actualmente, las principales líneas de actuación?

Creo que el cambio más relevante se produce en el momento en el que la RSC pasa a ser parte fundamental de la estrategia de la compañía y de todo el Grupo Orange. Eso significa que cualquier acción que se ponga en marcha es analizada y valorada utilizando como variable clave nuestro impacto en el entorno en el que prestamos servicio y pasa, por tanto, a ser algo que impregna cualquier acción o decisión que se toma.

Estamos profundamente comprometidos con el territorio en el que desarrollamos nuestra actividad y ese compromiso se traduce en distintas iniciativas que se enmarcan en tres líneas estratégicas que para nosotros son prioritarias.  Están muy relacionadas con nuestro negocio y creemos que es donde más podemos aportar y tener un mayor impacto:

– Un uso responsable de la tecnología
– Inclusión social digital
– Cambio climático

¿Puedes poner ejemplos, citar buenas prácticas de tu organización en esta materia?

Creo que lo más impresionante es la cantidad de acciones que están en marcha en la compañía, muchas de ellas hace mucho tiempo, y que demuestran el interés profundo y sincero de Orange por estas cuestiones: desde las políticas de conciliación, medidas de apoyo a las familias o programas de formación en habilidades digitales dirigidos de manera específica a distintos segmentos de la sociedad, hasta nuestra profunda convicción de que podemos tener un papel importante para impactar menos en nuestro entorno con nuestras infraestructuras.

También destacaría iniciativas de reciclaje de móviles o recuperación para un nuevo uso, u otras más sociales como “Gigas solidarios”, que permite disfrutar de internet a familias en riesgo de exclusión.

Como se puede comprobar, son muchos los ejemplos de acciones de las que estamos muy orgullosos.

¿Qué papel tiene la comunicación de la RSC, qué destacarías de la misma?

Creo que hasta ahora hemos estado muy enfocados en trabajar en los proyectos para que fueran perfectos y cumplieran los objetivos que perseguían en términos de servicio y mejora de las condiciones de vida de los destinatarios de los mismos. En los últimos tiempos, ponemos más foco en comunicar dichos proyectos para que puedan ser conocidos de una manera más amplia y por tanto, ser visibilizados.

Para dar a conocer, de la manera más eficiente posible, aquellos aspectos que queremos destacar en nuestras líneas de acción prioritarias nos apoyamos en “partners “que tienen mucho que aportar y en expertos en las materias que tratamos.

¿Cuáles son las principales ventajas y beneficios de apostar por la RSC?

Además de los beneficios evidentes que aportan muchos de los proyectos que tenemos en marcha y otros muchos que promueve y ejecuta la Fundación Orange, creo que las ventajas más evidentes están asociadas a las eficiencias que aporta analizar, desde el primer momento de su desarrollo, cualquier acción o producto desde la perspectiva de RSE. Esta visión contribuye a  hacer mejor las cosas, de forma más sencilla y con una visión clara de los impactos positivos que se generan y minimizando, por tanto, los posibles impactos negativos.

Añadiría que esta perspectiva permite medir de forma más sencilla cualquier acción puesta en marcha, evaluando sus impactos para poder así medir objetivos y ver qué progresión sigue hasta su cumplimiento.

¿Cuáles son, en tu opinión, los errores que se siguen cometiendo en la actualidad en torno a la RSE y cómo subsanarlos?

Bueno, como cualquier otra actividad en cualquier materia, es inevitable cometer errores…. Quizá hace unos años -y cada vez menos, por cierto- pensar que la RSE era labor de un departamento de la compañía. La RSE es un verdadero cambio de perspectiva que afecta a toda la organización de manera transversal.

Aún se oye en determinados foros  que las empresas ‘hacen’ RSC por cosmética, por lavado de imagen, porgreenwashing, ¿qué opinas de ello y cómo  se puede revertir la situación?

Imagino que habrá casos como los que mencionas…. Pero te aseguro que en lo que tienen que ver con Orange, tanto hoy como hace más de 15 años, la RSE forma parte intrínseca de nuestra actividad y es algo que los empleados reclamamos y de lo que participamos activamente. Sin duda, nuestros clientes y “stakeholders” no entenderían que lo  hiciéramos de otra manera.

¿Cómo estáis fomentando en Orange la comunicación y el diálogo con los grupos de interés, cómo lo lleváis a cabo y cuáles son las principales buenas prácticas que destacarías?

Diría que estamos en un proceso de aprendizaje continuo, buscando maneras de captar mejor las necesidades y “feedback” de los grupos de interés con los que trabajamos. Creo que en estos años hemos construido relaciones firmes, sinceras que nos aportan mucho valor a todas las partes. El reto es enriquecerlas y, sin duda, ayudar a construir una “red” de la que nos beneficiemos todos para impulsar acciones más efectivas, que puedan adquirir más escala y que por tanto, tengan un impacto mayor.

¿Cuáles son, en tu opinión, los retos y desafíos de la RSC en nuestro país?

Seguramente, extender la necesidad de analizar, desde una nueva perspectiva, todas las acciones y proyectos desde su inicio. Empresas de todos los tamaños y ciudadanos debemos ser conscientes de que solo con ese cambio de perspectiva e interiorizando la necesidad de ser más responsables con nuestro entorno, podremos ser capaces de aportar algo más a la sociedad de la que somos parte y de generar impactos positivos y perdurables.

¿Y los retos de Orange? ¿Cómo los vais llevar a cabo?

Los retos que tenemos están recogidos en nuestro nuevo plan estratégico 20-25. Trataremos de impulsar y poner en marcha proyectos apasionantes relacionados con nuestras principales líneas de actuación.

En este sentido, conseguir que los empleados de la compañía, nuestros clientes y nuestros grupos de interés aprecien y valoren como algo distinto las cosas que hacemos es para mí el mayor reto.

¿Y como llevarlo a cabo? Lo primero que diría es con enorme ilusión y también con un enorme sentido de la responsabilidad, porque sabemos que está actividad es muy importante para Orange.

Para afrontar con garantías este desafío contamos con el mejor equipo de la mejor compañía, con el respaldo de una gran Grupo que nos reta a ir más allá y, desde luego, con  unos ”partners” y socios que nos ayudan, nos impulsan y nos inspiran a diario.

Escucha aquí la entrevista completa con su protagonista: